La nueva exposición temporal del Museo Carmen Thyssen Málaga, Reflejos del Pop, presenta un análisis artístico sobre cómo recibió nuestro país este movimiento internacional, que se desarrolló en España entre 1960 y1980. Para llevar acabo dicho análisis, se han seleccionado cuarenta y seis obras de autores que adaptaron el lenguaje del arte pop norteamericano y europeo a la cultura española. Los artistas seleccionados han sido: Eduardo Arroyo, Luis Gordillo, Equipo Crónica y Equipo Realidad.
“El arte pop recibe su nombre de la abreviatura de ‘popular art’ y surge a mediados de los años cincuenta en Estados Unidos e Inglaterra, aunque su verdadero apogeo se produce en los años sesenta. Este arte popular hace referencia al estilo qu ese utilizaba en el diseño de publicidad, cartelería y revistas de la época, y se inspira en la sociedad consumista para crear temáticas directas, realistas y accesibles a todo el público” explican desde la organización. “El arte pop internacional se centra en el concepto artístico, en la investigación plástica y en la representación de objetos y elementos poco tradicionales, como por ejemplo latas de sopa, automóviles, tiras de cómic, monedas, cervezas,etcétera. De esta forma, los temas clásicos del arte ceden su protagonismo a los objetos de consumo reproducidos en serie, construyendo así nuevos temas a partir de imágenes de la vida cotidiana” subrayan.
Las técnicas más empleadas por los artistas pop son el collage, combinando la pintura con objetos e imágenes reales, y el fotomontaje. Son habituales los colores brillantes, puros y sin matices; el uso de técnicas diversas, como la serigrafía, la pintura acrílica o la escultura; y el uso de materiales poco frecuentes, como el poliéster o la gomaespuma.
Reflejos del Pop en España
En un panorama artístico dominado por la abstracción informalista, el movimiento pop irrumpe en España a comienzos de los sesenta, imbuido de un marcado sentido crítico con el marco social, político y cultural de las décadas finales del franquismo. “La apropiación y reinterpretación de imágenes procedentes de la prensa, la publicidad, los cómics, el cine, la televisión o la historia del arte, la estructuración de las obras en series, el uso de tintas planas y colores reducidos y estridentes serán sus principales características formales, si bien los artistas españoles plantearán una intervención de claro contenido social y político sobre esa iconografía popular reutilizada. No supondrá, sin embargo, un movimiento colectivo, sino la asimilación por parte de un número reducido de creadores españoles del lenguaje pop americano y europeo de Rosenquist, Lichstenstein, Erró, Adami, Hockney, Rotella, etcétera, desde intereses y perspectivas diversas, durante momentos concretos de su producción” señalan.
Para mostrar este entorno, las elección de pinturas que aquí se presentase ha limitado a los cuatro artistas y equipos creativos mencionados –muy distintos entre sí pese a su referente común de partida–, y al momento en que esos ‘ReflejosdelPop’ alcanzaron su apogeo, entre finales de los años sesenta y principios de los setenta del sigloXX.