El ciclo dedicado a la música independiente ‘Entrance’, enmarcado dentro de la programación de Culturama de la Diputación de Málaga, trae al escenario del Centro Cultural Provincial María Victoria Atencia (MVA) el próximo 15 de marzo al dúo sevillano ‘I am Dive’. Las entradas son gratuitas y pueden gestionarse a través de la página web www.mientrada.net, con un máximo de dos invitaciones por persona.
El viaje musical de estos jóvenes, Esteban Ruiz y José A. Pérez, comienza en el año 2010 cuando ambos militaban en las bandas sevillanas ‘The Baltic Sea’ y ‘Blacanova’, respectivamente. Apenas nueve meses después de algún que otro concierto, salía a la luz su primer EP, ‘Fall’, publicado bajo su propio sello discográfico WeAreWolves. Desde entonces, no han cesado de actuar en prestigiosos festivales en Inglaterra, Ucrania, Francia, Islandia, Canadá, Estados Unidos, o China, entre otros países.
En junio de 2016 presentaron su noveno disco, ‘Music For a Silent Running’, espectáculo en el que se estrenan como compositores de bandas sonoras. El proyecto surge tras la invitación para participar en el festival CinemaScore en el que las bandas debían escoger películas y reinventar bandas sonoras alternativas a otras ya existentes.
I Am Dive se decantó por el cásico de culto de ciencia ficción ‘Silent Running’ (Naves Misteriosas), dirigida por Douglas Trumbull y coescrita por Michael Cimino en 1972. ‘Silent Running’ es una película ambientada en un futuro no muy lejano, en el que la Tierra ha dejado de ser un planeta habitable y todos sus ecosistemas están conservados en naves espaciales que vagan por el espacio. La cinta combina una visión distópica de la sociedad con una imaginería poética (hay que recordar que Trumbull fue el responsable de los efectos especiales en ‘2001. Una odisea del espacio’); un material que se complementa a la perfección con la música, evocativa y de tintes paisajistas, que facturan I am Dive.
Adaptando un material que tenían escrito pero que no había sido publicado y añadiendo nuevas composiciones, deciden olvidarse de la voz y hacer un disco exclusivamente instrumental, dando así total importancia a la creación de texturas sonoras. Con ocho cortes de melodías envolventes y cadencias misteriosas, el particular ambiente con toques de post-rock del dúo consigue transportar al oyente a un mundo de galaxias y nebulosas.
Arreglos cuidadosos, minimalismo y una continua evocación a la naturaleza hacen una identidad única para este grupo que se consolida como uno de los más interesantes de la escena electrónica nacional e internacional, comparable a artistas de la talla de Jason Molina, Neil Young, Mark Kozelek, Sigur Ròs, José González o Thom Yorke.
2018-03-05