El grupo granadino Dorian Gray, están de vuelta presentando ‘La Canción de los cobardes’ editada bajo el sello Warner Music, es una canción marca de la casa con la que anticipan lo que está por venir.
“Si cantasen en inglés y hubieran nacido en un barrio obrero del Reino Unido necesitarían apenas un poco de suerte para vender millones de discos en todo el mundo” apuntan sus productores. Aunque Dorian Gray vienen de Granada (ciudad que no para de lanzar grandes grupos y artistas), lo suyo es un pop de base claramente anglosajona, que va más allá del recurrente power pop para consolidarse como una propuesta original y actual, con letras en castellano y poderosas guitarras.
El influjo británico no sólo se reconoce en el sonido, sino sorprendentemente en las letras. Aparte del contenido de las mismas, Dorian Gray cuida especialmente la sonoridad, con frases secas, palabras cortas, casi monosílabos, que logran reproducir en castellano el efecto del mejor pop en inglés, acentuado por la especial voz de Paco Chica, desbordada en algunos estribillos, contenida en los medios tiempos, arrastrada en los tramos más íntimos, pero siempre personal, ronca, a punto de romperse.
El sonido de Dorian Gray, desde la primera escucha, pide un concierto, un escenario en el que el grupo pueda dar todo lo que no cabe en un disco pero que se adivina en sus canciones: la fuerza vocal de Paco Chica, un arrollador frontman, junto a las guitarras enérgicas de Salva Serrano y Pepe Molina, y la batería de Miguel Ángel Robles.