La sala ‘El Portón’, en la localidad malagueña de Alhaurín de la Torre, acoge la muestra ‘Del Cenit al Nadir, pasando por Leonardo’ de Jacinto Lara. Una treintena de obras entre pinturas, dibujos y esculturas componen esta exposición, primando sobre todo las primeras.
Sus pinturas, casi una veintena, son de gran y mediano formato, con las resinas acrílicas, los pigmentos y el grafito como principales técnicas. Lara, acostumbrado a trabajar con series, más que con una sola imagen, ofrece aquí tres series, dos de pinturas y una de dibujos en tinta china. Por un lado, la serie que dedica al color (azul, blanco, rojo, amarillo), como homenaje a Sengai Gibon, monje zen japonés que entre mediados del siglo XVIII y el siglo XIX, produjo un extenso legado artístico considerado como una de las maravillas del arte universal. Su obra ‘El universo’ “es, dentro de su aparente sencillez, un compendio del concepto de escritura como imagen de la palabra, desde un punto de vista plástico, con una línea abstracta repleta de significado que remite al signo y el pictograma, con el trazo en evolución desde la figuración a la abstracción” han explicado los organizadores.
Nacido en el pueblo de Fernán Núñez (Córdoba) en 1953, Jacinto Lara Hidalgo vive actualmente en la capital cordobesa. Su trayectoria en el mundo del arte, en diversas facetas (dibujo, pintura, escultura, grabado y escritura) abarca un periodo de casi cuatro décadas. Ha recibido numerosos premios y reconocimientos por su labor creativa. “Lector, viajero y observador incansable, enamorado de la diversidad andaluza y de Córdoba en particular y gran amante de las culturas hindú y japonesa, Jacinto Lara nos muestra en su obra que la ausencia dice tanto como la presencia. El discurso y el silencio pueden ser igualmente expresivos” han subrayado.
2016-03-31