Con motivo del 50 aniversario de la Semana Internacional del Cine de Autor de Benalmádena (SICAB), el Festival de Málaga y el Ayuntamiento de Benalmádena han querido rendir un homenaje a su director, Julio Diamante, entregándole como reconocimiento a su trayectoria la Biznaga del Festival y La Niña de Benalmádena.
Este festival surgió a finales de los sesenta y fue considerado como un evento pionero. Con tan solo dos años consiguió darse a conocer en todo el mundo, lo que ayudó a la internacionalización de Málaga y España en los últimos años de la dictadura franquista.
Julio Diamante ha destacado su amor por el cine, la cultura y la libertad. “Fue este amor al cine y a Andalucía por lo que decidí asumir la dirección del Festival”, asegura el premiado. La concejala de Cultura de Benalmádena, Elena Galán, ha mostrado su agradecimiento al ex director del SICAB por su aportación a la juventud de la época que luchaba por un mundo más justo, más libre y más solidario: “esperamos que sirva para que las nuevas generaciones de benalmadenses tengan en su memoria la Semana de Cine de Autor y el nombre de Julio Diamante”.
Con motivo de esta efeméride, se ha realizado un documental que cuenta la historia complicada de libertad que tenía que buscar el certamen de la localidad costasoleña en un momento muy difícil, con la dictadura franquista y llegó a periodo definido como transición tras la muerte del dictador, pero al que consiguieron darle estabilidad. Esta cinta es una producción del Ayuntamiento de Benalmádena y el Festival de Málaga, que acredita a Diamante como “un gran luchador, promotor, especialista y director que hizo todo lo que estuvo en su mano para que fuera lo más grande posible”.
Documental
El homenaje comenzaba con la proyección del documental ‘Una historia de cine y libertad. Semana Internacional de Cine de Autor de Benalmádena’ que narra la evolución dela SICAB que comenzó con un encuentro mítico de cineastas que se organizó entre 1969 y 1989.
Su fundador y director en sus dos primeras ediciones fue Luis Mamerto López Tapia que supo crear un acontecimiento atractivo y supuso un gran éxito, después de un año de transición dirigido por José Luis Guarner, el director durante los catorce años restantes fue el cineasta Julio Diamante que le dio la impronta y la personalidad que lo hizo mundialmente famoso y consolidó un festival de prestigio que llega hasta nuestros días. Es una historia de cine y libertad que supuso una ventana al conocimiento y cultura internacional, cuya importancia y relevancia ahora, cincuenta años después, se celebra.